La cantante y presentadora anunció esta semana la postergación de las fechas restantes de su residencia Studio Sessions en Las Vegas, explicando que necesita estar presente para sus hijos debido al delicado estado de salud de su exesposo, Brandon Blackstock.

“Desafortunadamente, necesito posponer el resto de las fechas de agosto en Las Vegas”, escribió en un mensaje compartido en Instagram. “Normalmente soy muy reservada con mi vida personal, pero durante el último año el padre de mis hijos ha estado enfermo, y en este momento necesito estar completamente presente para ellos”.

Clarkson agradeció a sus seguidores por su comprensión y empatía: “Siento mucho lo sucedido para quienes compraron boletos. Aprecio sinceramente su gracia, amabilidad y comprensión”.

Kelly y Brandon estuvieron casados durante siete años. La cantante solicitó el divorcio en 2020 y este se finalizó dos años después. Tras la separación, Blackstock dejó la industria musical para convertirse en ranchero a tiempo completo y anfitrión de rodeos.

Esta no es la primera vez que Clarkson se aleja temporalmente de sus compromisos profesionales por motivos personales. En marzo, también tomó una pausa inesperada de su programa The Kelly Clarkson Show, ausentándose durante casi la primera mitad del mes para atender un asunto privado.

Aunque la artista no ha dado detalles sobre nuevas fechas, dejó claro que su prioridad en este momento es estar con su familia.